Me gustaria recordar mis primeros pasos haciendo crochet, como un humilde homenaje personal a tantas mujeres que a lo largo de la historia nos han dejado este legado de belleza, trabajo y armonia.
Por eso quiero traer al presente a dos cariños de mi vida, mis tias Sarita y Ecildita.
Sarita era una viejecita de pelo muy blanco que vivia en Juanico, con quien yo solia pasar un mes y medio de mis vacaciones veraniegas, la pobre se las veia mal para conseguir mantener entretenida a una niña de unos 9 años y se le ocurrio enseñarme a tejer, pues... no me lleve bien con las dos agujas, por lo que abandone enseguida, y como me gustaba muchisimo leer, accedio a darme permiso para revolver entre sus viejas revistas, a ver si encontraba algo que me interesara. Infaltables las revistas Labores, entre otras, pero yo quede enamorada de aquellas prendas, que, en mi fantasia infantil, crei hechas por manos magicas y no humanas.
Y la tía Sarita, aliviada, comenzo a enseñarme el arte del crochet, y teji metros y metros de cadeneta, y luego varetas, sencillas y dobles, y cuando decidio que estaba preparada para iniciar un trabajo "de verdad" (como yo le pedia) llego el dia de irme, y , ya en casa, entregada a la escuela, los libros y los juegos olvide por un tiempo el asunto.
Luego fue el turno de mi tía Ecildita, en Montevideo, a quien encontre muy feliz, elaborando una colcha en cuadritos, claro , en cuadritos de crochet, y al verla revivio en mi el gusto por esa tarea, recuerdo que ella me enseño a darle forma , y al ver que de verdad me aplicaba, me regalo un monton de lana y una aguja, luego, con una unica palabra, "disfruta", me dejo instalada en un sillon de su sala mientras en el tocadiscos sonaba una melodia que ya no recuerdo.
Doy gracias a estas mujeres que me dieron lo que, hoy dia, me ayuda muchisimo, llena mis horas , mantiene mis manos ocupadas y me permite entregar una parte de mi , pues cada vez que tejo algo para alguien, es todo mi cariño el que esta representado en esa tarea...
asi que ... SArita ... Ecildita... las llevo en mi corazon, para siempre ...
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